La Universidad Nacional de las Ciencias Dr. Humberto Fernández-Morán (UNC) culmina con éxito su primer Curso de Acompañamiento a la Iniciación Universitaria (CAIU), una experiencia formativa sin precedentes que reunió a más de 500 jóvenes de todo el país en un proceso integral de orientación académica, motivación vocacional y construcción de identidad universitaria.
Este curso marcó el punto de partida formal de las actividades académicas de la UNC, que dieron inicio en el marco del 1er. Congreso Internacional de Convergencias Científicas para un Futuro Compartido, celebrado en el mes de mayo, lo cual le otorga a la universidad un marco académico e institucional de alto nivel.
El CAIU fue diseñado como un espacio de encuentro entre los estudiantes y el novedoso modelo educativo de la institución, que tiene como objetivo formar profesionales con pensamiento crítico, excelencia académica y el compromiso con el desarrollo nacional.
El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, llamó a los estudiantes a ser protagonistas de la independencia científica y tecnológica de Venezuela: “Ustedes serán los protagonistas de una nueva ética de la independencia científica y tecnológica de Venezuela, la época del surgimiento de un mundo multipolar y pluricéntrico de conocimiento, de una mundo multidiverso, de un mundo que comparte nuevos métodos para la educación, para el aprendizaje, de un mundo que es capaz de integrar la ciencia para el bien, para el avance, para el desarrollo y para la paz”.
Por su parte, la rectora Gabriela Jiménez Ramírez elogió el espíritu de los jóvenes aspirantes e invitó a la juventud a dedicar todos sus días a este proyecto de estudio, porque “la ciencia y la tecnología son un territorio en disputa”, donde las y los jóvenes tienen mucho que ofrecer, desde la generación de ideas y proyectos que tributen al bienestar nacional.
Una experiencia educativa y humana
Para la profesora Diana Castillo, Directora Académica de la UNC, el CAIU representa una vivencia fundacional tanto para los estudiantes como para el equipo docente. Es la puerta de entrada a un modelo pedagógico que se fundamenta en los principios de la ciencia abierta y el humanismo, y busca democratizar el conocimiento como herramienta para el desarrollo nacional.
Afirma que el CAIU, “desde el punto de vista educativo y humano ha sido una experiencia extraordinaria”. Resalta que “los estudiantes no solo asistieron a clases, sino que vivieron lo que significa ser parte de esta universidad, con su visión, su propósito y su gente. Nuestro objetivo es claro: acompañar a los estudiantes en su transición hacia la vida universitaria, prepararlos y motivarlos».
Cada módulo del curso fue impartido con un enfoque práctico, vinculado a la realidad nacional y a los desafíos de la ciencia contemporánea. El curso incluyó contenidos obligatorios claves como pensamiento lógico-matemático, lingüística, manejo de herramientas tecnológicas, metodología de la investigación y filosofía. Luego se agregaron los tópicos de física, química y biología.
Más allá de la nivelación, el CAIU también funciona como un espacio de orientación vocacional y autoconocimiento, permitiendo a los estudiantes explorar diversas carreras científicas y tomar decisiones informadas sobre su futuro académico, “el curso permitió que muchos jóvenes redefinieron sus vocaciones”, señaló Castillo.
Este programa, que ha sido recibido con entusiasmo, busca asegurar una base sólida para los nuevos ingresos. Aclaró la profesora, que el CAIU no es permanente, es coyuntural, sin embargo, se extenderá mientras sea necesario porque esto es un proceso de acompañamiento integral. “Esta primera cohorte nos ha demostrado que existe una juventud dispuesta al conocimiento, dispuesta al aprendizaje y dispuesta a la ciencia y la tecnología”.
“La formación académica no se limitó a las aulas. Tuvimos salidas formativas a instituciones aliadas, encuentros con investigadores, y sobre todo, muchas conversaciones. Cada joven fue escuchado, orientado, acompañado”, aclaró la Directora.
Por su parte, el Director Estudiantil, Irwing Acevedo, destaca el valor estratégico del curso al señalar que el CAIU fue pensado para preparar a los estudiantes, no solo para enfrentar los retos académicos, sino para construir desde ya una relación crítica y creativa con su entorno.
El CAIU no solo ofrece herramientas académicas, también promueve el sentido de pertenencia institucional, la convivencia responsable y la formación integral, durante 12 semanas los estudiantes participaron en diferentes actividades:
Visita al Panteón Nacional para rendir honores a Simón Bolívar y, en especial, al epónimo de la universidad, el Dr. Humberto Fernández-Morán, para conectar a los estudiantes con el legado científico. Siembra de árboles, en los espacios compartidos con el IVIC, para la regeneración ecológica enmarcada en la Gran Misión Madre Tierra Venezuela.
En el ámbito físico y mental, se organizaron encuentros recreativos y deportivos en disciplinas como boxeo, atletismo y fútbol, afianzando la actividad física como un pilar fundamental para el bienestar integral.
Asimismo, se realizaron visitas a instituciones como, el Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), Fundación Instituto de Ingeniería para Investigación y Desarrollo Tecnológico ( FIIIDT), Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), asimismo, conocieron los viceministerios de Transformación Digital y Telecomunicaciones, donde se abordaron temas de Ciberseguridad e Inteligencia Artificial.
Igualmente, se realizaron jornadas de orientación en distintos tópicos, como manejo del estrés, manejo de redes sociales, el fomento a la integración y a la orientación universitaria. Para finalizar esta primera etapa, los estudiantes disfrutaron de actividades acuáticas que combinan recreación y reflexión sobre la experiencia compartida.
“Hemos realizado todo un proceso de acompañamiento sistemático y permanente, para afianzar la política aterrizada del bienestar integral de nuestra comunidad estudiantil”, explicó Acevedo.
Aseguró que la Dirección Estudiantil está enfocada en la política de orientación, de integración, de comunidad, de manera que los jóvenes “cada día se incorporen a los espacios académicos, hagan vida estudiantil, se apropien de cada espacio, de cada laboratorio, de cada centro para de esta manera poder afianzar el tejido universitario”.
En cuanto a los estudiantes que gozan del beneficio beca residencia “nos enfocamos en una atención individualizada y colectiva para poder dar respuesta a sus necesidades en las tres áreas principales, la atención de salud, la atención de cobertura bienestar y la atención de orientación”.
Gracias al CAIU los estudiantes se reconocieron como parte de una comunidad científica en construcción, con un papel activo y protagónico. “Fue una jornada victoriosa, que nos llena de alegría por apoyar, afianzar y ofrecer a los futuros científicos del país, bienestar estudiantil”.
Voces que reflejan una transformación
Los testimonios de estudiantes confirman que el CAIU fue una experiencia única y transformadora.
Airadhmhern Rojas resalta el apoyo y la integración que ha encontrado desde el momento de la inscripción y su postulación a Filosofía. Resalta el compañerismo, valora la calidad humana y la energía positiva del entorno, lo cual le permite ser “más auténtica y felíz”. “La UNC se ha convertido en un lugar donde me siento valorada y acompañada, expresó”.
Por su parte, Katrine Romero, quien iniciará estudios en Física, manifiesta su satisfacción sobre este primer acercamiento a la UNC: «He aprendido muchísimo. Al principio tenía miedo, pero este curso me dio confianza y motivación. Hoy siento que pertenezco a algo grande”.
Manifiesta que superó las expectativas iniciales de incertidumbre, pero ha encontrado amistades valiosas y ha aprendido a manejar situaciones que están fuera de su alcance. Asimismo destaca su transformación personal al superar el miedo a hablar en público y visualiza un “futuro prometedor”.
Para Yahir Peñate, de la carrera de Ciberseguridad, el éxito del CAIU se debe al enfoque pedagógico integral e innovador de sus cuatro áreas fundamentales: Por ejemplo, matemáticas se enfoca en un proceso comprensivo de aprendizaje, evitando que una base débil en matemáticas se convierta en una barrera para seguir una carrera con vocación.
“Aquí no te enseñan solo contenido. Nos están formando para ser parte del desarrollo del país desde la ciencia. Eso me entusiasma”.
La fructífera y enriquecedora experiencia que ha significado el CAIU se evidencia en la satisfacción y motivación de una nueva comunidad universitaria que ha comenzado a formarse bajo principios de excelencia académica, inclusión, pensamiento crítico y vocación de servicio. Representa un importante avance en la propuesta de esta nueva universidad, que ha superado las expectativas académicas.
La Universidad Nacional de las Ciencias ha iniciado su trayectoria, encaminada a ser una institución de educación universitaria de referencia nacional e internacional, haciendo honor a sus principios fundacionales, orientados a la formación de científicos y profesionales con visión crítica, sensibilidad social y vocación de servicio. La UNC avanza y, con ella, una generación de jóvenes decididos a construir el futuro desde la ciencia. El CAIU ha sido la primera muestra de esa promesa hecha realidad.
Prensa UNC / YA








