En la historia de la ciencia venezolana del siglo XX destaca la figura de Zoraida Luces de Febres (1922–2015), investigadora cuyo trabajo marcó un antes y un después en la botánica, especialmente en la agrostología, la disciplina dedicada al estudio de las gramíneas y otras plantas herbáceas.
Su dilatada vida y trayectoria académica es reconocida por sus aportes en la investigación, la consolidación de instituciones científicas nacionales y la formación de generaciones que han sido fundamentales para alcanzar el alto nivel que hoy ostenta la investigación botánica en el país.
Nacida el 8 de junio de 1922 en Caicara de Maturín, estado Monagas, Zoraida Luces se vinculó tempranamente con el mundo científico. Sin haber concluido sus estudios de bachillerato, cuando apenas tenía 15 años, comenzó a participar en un curso de botánica taxonómica impartido por el profesor Henri Pittier, eminente naturalista suizo. Este encuentro despertó en la joven un gran entusiasmo por los estudios de la flora y las plantas del país.
Antes de obtener el título de Bachiller en Filosofía y Letras en el Colegio Católico Alemán de Caracas, con diecisiete años, se convirtió en asistente de Pittier, entonces director del Servicio Botánico del Ministerio de Agricultura, antecedente del Herbario Nacional de Venezuela, comenzando a desarrollar actividades de investigación de campo y clasificación taxonómica.
A comienzos de la década de 1940, Luces obtuvo una beca que la condujo al Instituto Smithsonian en Washington, donde se formó bajo la mentoría de Mary Agnes Chase, autoridad mundial en gramíneas. La influencia de Chase dejó una profunda huella en la trayectoria académica de la científica venezolana. De ese aprendizaje surgió su pasión definitiva por la agrostología.
En muchas ocasiones, expresó sentirse orgullosa por su aporte a la primera traducción al español del libro de su maestra y amiga Agnes Chase, First Book of Grasses (1959), publicada en 1960 con el título Primer libro de las gramíneas, la estructura de las gramíneas explicada a los principiantes.
De regreso al país, en el ámbito académico formal obtuvo el título de Licenciada en Ciencias Naturales en la Universidad Central de Venezuela (UCV) en 1950 y, más tarde, el grado de Doctora en Ciencias Biológicas en 1958, lo cual la convirtió en la primera mujer del país en obtener ambos títulos.
Aportes científicos
La obra científica de Luces de Febres se sitúa con claridad en la taxonomía y en la sistemática de las gramíneas venezolanas. Entre sus contribuciones más notables están:
- La descripción de nuevas especies para la ciencia, hoy registradas con la abreviatura “Luces” en la nomenclatura botánica internacional.
- La elaboración de claves de identificación y manuales ilustrados que facilitaron el trabajo de campo y la docencia.
- Publicaciones pioneras como “Géneros de las gramíneas venezolanas” y artículos de referencia en revistas nacionales e internacionales.
Durante la primera etapa de su vida científica, Luces produjo trabajos pioneros como «El abrojo de Los Andes» (1939) y «Ensayo monográfico sobre las especies venezolanas del género Chloris» (1940). Luego de su formación con Chase, generó varias publicaciones clásicas para la literatura agrostológica venezolana:
- «New grasses from Venezuela» (1942)
- «Distribución altitudinal de las gramíneas en Venezuela» (1942)
- «Géneros de las gramíneas venezolanas» (1942)
Obras posteriores incluyen la revisión de Graminae, Palmae y Araceae para el «Catálogo de la flora venezolana» (1945-1947), obra fundamental escrita conjuntamente con Henri Pittier, Tobías Lasser, Ludwig Schnee y Víctor Manuel Badillo. También publicó «Gramíneas nuevas o interesantes para la flora venezolana» (1947), «Especies de gramíneas nuevas para la ciencia» (1953), «Claves para la determinación de las subfamilias, tribus y géneros de las gramíneas de Centroamérica» (1959) y «Las gramíneas del Distrito Federal» (1963).
Influencia institucional y educativa
Como profesora de la Escuela de Biología de la UCV, Luces se destacó en asignaturas como Botánica Económica y Agrostología. Sus estudiantes recuerdan un estilo de enseñanza basado en la observación directa, el rigor del dibujo botánico y el trabajo constante en el herbario.
Por otra parte, desarrolló actividades de investigación taxonómica en el Laboratorio de Biosistemática y Citogenética Vegetal del Instituto de Biología Experimental de la Facultad de Ciencias de la UCV, abarcando la diversidad genómica en géneros de la familia de las poáceas en Venezuela. Igualmente, dictó cursos a nivel internacional y en diversas universidades e institutos de educación superior del país.
En el plano institucional ocupó cargos de gran relevancia, entre los que podemos mencionar:
- Presidenta de la Fundación Instituto Botánico de Venezuela Dr. Tobías Lasser
- Directora del Instituto Botánico (Ministerio del Ambiente)
- Miembro Correspondiente de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales de Venezuela
- Miembro de la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales y Segunda Vicepresidenta de la misma.
- Asesora científica de la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales
- Miembro de organizaciones internacionales como la Association for Tropical Biology y Miembro Correspondiente de la Sociedad de Mujeres Geógrafas de Estados Unidos.
Entre las distinciones que recibió se encuentran las condecoraciones Henri Pittier 1.ª Clase, Diego de Losada 1.ª Clase y Mérito al Trabajo 1.ª Clase.
Legado perdurable
La Dra. Zoraida Luces de Febres falleció en 2015 en Caracas, dejando una obra científica que constituye un valioso patrimonio para el estudio de la botánica y las gramíneas del país. La influencia de esa producción se hace evidente cada vez que se consultan sus publicaciones o se alude a una gramínea como “la especie de Luces”. Su labor en la consolidación del Herbario Nacional y la modernización del Instituto Botánico constituye un cimiento para investigaciones actuales en biosistemática y citogenética vegetal.
Son múltiples las manifestaciones que honran la memoria de la investigadora, entre las cuales está el Premio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación en Educación Media “Zoraida Luces de Febres”, otorgado a proyectos estudiantiles que fomenten la ciencia, la tecnología y la innovación.
Hoy su legado cobra especial relevancia, cuando Venezuela registra, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), el mayor porcentaje de mujeres dedicadas a la ciencia en América Latina. Más del 60% de investigadores del país son mujeres y el 75% de los proyectos financiados por el Estado están liderados por ellas.
Gabriela Jiménez Ramírez, rectora de la UNC, resaltó en el libro Mujeres de la Ciencia que “este liderazgo no solo muestra la capacidad y el compromiso de las científicas venezolanas, sino también un cambio cultural progresivo en la academia y en los centros de investigación/innovación”.
Este contexto se vincula con la creación de la Universidad Nacional de las Ciencias Dr. Humberto Fernández-Morán, institución cuyo propósito es formar una nueva reserva científica nacional y proyectar el trabajo de investigadoras e investigadores en áreas estratégicas. Al recordar a Zoraida Luces de Febres, rendimos un merecido reconocimiento a esta excelsa científica venezolana y enaltecemos los significativos aportes de las mujeres venezolanas al desarrollo científico del país.
Prensa UNC / YA